domingo, 6 de noviembre de 2011

Me acerqué al mostrador
a beber un poco de Ron.
Me atendió un viejo un poco raro
dijo ser un tipo sabio.
La noche no venía muy bien
mi garganta empezaba a quemar
y de pronto el viejo se me acerca
me ofreció fumar de su cigarro.
Y empezó a contarme las vueltas de la vida
sus historias, su experiencia y su penar.
Que no todo en el mundo es alegría
sin embargo uno siempre tiene que saberla disfrutar.
Sus errores reconoció
así fue como el aprendió.
El destino uno no lo maneja
las cosas sucedieron así.
Pero igual, no se arrepintió
dijo "nene haceme un favor,
hace todo lo que a vos te parezca
si es que así vos sos feliz".
Me enseñó a no joder la vida a otras personas
y que hay cosas que jamás entenderé.
A no tener ese miedo a la muerte
la vida es muy corta pero hay que saberla disfrutar.